80 años de Ibáñez, mucho más que Mortadelo y Filemón

El dibujante Francisco Ibáñez es conocido principalmente por ser el creador de los inmortales detectives de la CIA Mortadelo y Filemón. Hoy, en el día que el genial Ibáñez cumple 80 años, le dedicamos este post recordando a otros personajes que, como los tronchantes agentes secretos, vieron la luz en los años sesenta y acompañaron la infancia de los niños que crecieron en los setenta y ochenta.

El historietista y su vida

Ibáñez dibujado por él mismo

Aunque hemos empezado esta entrada llamando “dibujante” a Francisco Ibáñez, el término no le hace justicia. Es más adecuado usar la palabra “historietista”, ya que él se encargó de concebir las historias, dibujarlas y decidir cada palabra que dicen sus personajes.

Nació el 15 de marzo de 1936 en Barcelona, hijo de un alicantino y una andaluza. Era solo un niño cuando la revista Chicos publicó su primer dibujo en la sección “Colaboraciones de nuestros lectores”. Aunque buscó una salida laboral, primero como botones, y luego como empleado de banca, en la década de los cincuenta colaboraba como profesional con sus primeras historietas para las publicaciones “La Risa” y “Paseo Infantil.”

En 1957 dejó su trabajo en el banco para dedicarse por completo a la historieta, empezando a colaborar con la editorial Bruguera. En 1958 en la revista Pulgarcito de esa editorial vió la luz la primera historieta de sus personajes de mayor éxito: Mortadelo y Filemón. Ibáñez colaboró con Bruguera hasta el año 1985, creando otros personajes de los que ahora hablaremos, y consiguiendo un éxito sin precedentes con las historias largas por entregas de Mortadelo y Filemón.

En 1985 empezó a trabajar para Ediciones Grijalbo, con la peculiaridad de que los derechos de autor de sus personajes seguían perteneciendo a su anterior empresa, Bruguera. Así que creó nuevas series como  “Chicha, Tato y Clodoveo, de profesión sin empleo”. Por suerte para todos, en 1988 Ediciones B se hizo con todo el fondo editorial de Bruguera y llegó a un acuerdo con Ibáñez, así que don Francisco regresó a los personajes que lo hicieron famoso, escribiendo y dibujando varios albumes al año.

13, Rue del Percebe

13, Rue del Percebe

Esta historieta fue publicada por primera vez el de de marzo de 1961 en la revista Tío Vivo. En realidad, se trata de una macroviñeta que ocupa una página y muestra el interior de un edificio de planta baja, tres pisos y azotea, siendo cada apartamento una viñeta. Se publicaron regularmente historias durante 20 años, la mayoría de Ibáñez, pero alguna de otro dibujante. Después se hicieron distintas recopilaciones, la última historieta de Ibáñez se publicó con una de estas recopilaciones en 2002.

Se cuenta que a Ibáñez dibujar esta historieta le provocaba una sensación de enclaustramiento, pero para los lectores resultan inolvidables sus personajes: desde Don Senén, el poco honrado tendero de la planta baja, hasta el moroso Manolo de la buhardilla, pasando por la Pensión Rita del primero derecha o el ladrón Ceferino del tercero izquierda.

Aunque ha sido negado varias veces por los guionistas de las series, hay quien afirma que “Aquí no hay quien viva” y “La que se avecina” están inspirados en 13, Rue del Percebe.

El botones sacarino

El botones sacarino el terror  de la oficina

El personaje lo creó Francisco Ibáñez en 1963 para la revista El DDT. El Botones Sacarino está inspirado en un famoso personaje del comic franco-belga Tomás el Gafe (creado por André Franquien en 1957). El personaje de Ibáñez es el botones de un periódico, muy torpe e ingenuo, que provoca líos continuamente, siendo la principal víctima de sus enredos “El Presidente”, y apareciendo como culpable sin serlo “El Director”.  Esta serie fue editada en Alemania con el nombre de “Tom Tiger”.

Pepe Gotera y Otilio

Pepe Gotera y Otilio

Pepe Gotera y Otilio, chapuzas a domicilio es una serie de historietas del gran Ibáñez que apareció por primera vez en la revista Tío Vivo en abril de 1966. Pepe Gotera es el jefe, y Otilio el currante de una desastrosa empresa de chapuzas. Trabajan poco, o más bien nada, y Otilio tiene una fuerza increíble y un apetito voraz. La serie de Antena 3 Manos a la obra, emitida entre 1998 y 2001, estaba inspirada en estos personajes.

Rompetechos

rompetechos

Este miope personaje vió la luz también en la revista Tío Vivo, en 1964. El autor ha declarado que es su personaje favorito, y quizás por eso aparece con frecuencia colándose en otras de sus series. Llegó a tener sus propias revistas a finales de los 70 (Súper Rompetechos y Extra Rompetechos). En 2003 Ibáñez publicó historietas nuevas en la revista Top Comic. El protagonista de las historietas, a pesar de su nombre de Rompetechos, es bajito, despistado y miope, casi ciego. Su falta de visión le hace confundirlo todo y causar muchos y divertidos desastres.

Cualquiera de estas series es una fuente de inspiración inagotable para imprimir sobre cualquier soporte en nuestra web.

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